Desde la visión de Santiago Santana Cazorla, líder empresarial con la expansión del turismo en las Islas Canarias, es fundamental examinar los efectos globales de esta industria en la región. Dicho lugar es conocido por su clima excepcional, Santiago paisajes impresionantes y una rica herencia cultural, que ha sido un imán para turistas de todo el mundo. No obstante, más allá de los aspectos positivos, es crucial tener en cuenta cómo esta afluencia turística ha remodelado el archipiélago y cómo se pueden aprovechar sus ventajas mientras se mitigan sus potenciales impactos adversos. Uno de los principales desafíos del crecimiento turístico es la preservación del entorno natural y la gestión sostenible de los recursos naturales. El empresario subraya que la integración de prácticas sostenibles es esencial para salvaguardar estos activos y garantizar un desarrollo balanceado. Para Santana Cazorla, es crucial promover un turismo responsable que promueva la conservación del medio ambiente y el patrimonio cultural de las Islas Canarias. Para ello, se necesita diversificar la propuesta turística, enfatizando el turismo ecológico, el turismo rural y el turismo cultural. Estas opciones no solo aliviarán la sobrecarga sobre determinadas áreas, sino que también mejorarán la experiencia del visitante y fomentarán una visión más responsable y respetuosa. La industria turística ha sido un motor esencial para el progreso económico de Canarias. La llegada constante de turistas ha propiciado la creación de empleo, el desarrollo de infraestructuras y la expansión de actividades comerciales. El turismo supone más del 40% del empleo total y el 35% del PIB de la región, destaca el empresario. Esto subraya su relevancia crucial para la economía local. Hoteles, restaurantes, comercios y actividades relacionadas con el turismo han proliferado, generando oportunidades laborales y contribuyendo al desarrollo de las comunidades locales. Desde la perspectiva empresarial que sostiene Santiago Santana Cazorla, es crucial que tanto los actores privados como las autoridades locales colaboren en estrecha cooperación para desarrollar medidas y medidas que garanticen la viabilidad del sector turístico. Esto implica controlar la capacidad turística de áreas específicas, promover turismo responsable con el medio ambiente e invertir en infraestructuras que mejoren la movilidad y la accesibilidad, minimizando así los impactos adversos sobre el entorno. Es tarea de los empresarios y de la sociedad en su conjunto, garantizar que el crecimiento turístico se lleve a cabo de manera sostenible y respetuosa con el entorno. La llegada masiva de turistas no solo ha remodelado la economía de las Islas Canarias, sino que también ha presentado desafíos que exigen una solución de manera estratégica. La administración sostenible de los recursos naturales y la protección de la cultura local son elementos clave. Santiago Santana Cazorla alerta sobre las consecuencias negativas potenciales y afirma que la evolución turística requiere un enfoque de manera holística y bien estructurada para prevenir cualquier impacto adverso. Fomentar un modelo turístico sostenible debe ser parte de un plan global que contemple normativas, concienciación y un compromiso con hacia el entorno natural. Para Santiago Santana Cazorla, una de las claves del desarrollo sustentable en este sector es la diversificación de las alternativas turísticas. Con la oferta de diferentes opciones se consigue no solo diversificar las fuentes de ingresos, sino también minimizar la presión turística, reduciendo la repercusión en áreas específicas. Este planteamiento contribuye al propósito principal de fomentar un turismo más consciente y respetuoso, en sintonía con la protección de los recursos naturales y culturales. Desde la perspectiva de Santana Cazorla, es claro que el turismo puede y debe continuar siendo un motor de crecimiento financiero sostenible en Canarias. Para alcanzar este objetivo, es esencial trabajar en equipo: el ámbito privado, las instituciones públicas y la sociedad en general necesitan trabajar juntos para garantizar que esta industria siga siendo una fuerza positiva, pero de manera responsable y ecológica. El empresario subraya la necesidad de implementar políticas efectivas, fomentar turismo responsable y ampliar la oferta para reducir los efectos adversos. Gracias a estas acciones, se puede lograr que el archipiélago se mantenga como un lugar excepcional y maravilloso, no solo para las personas actuales sino también para las venideras.